Gloria Fuertes fue una escritora madrileña cuya fama se hizo notable por sus colaboraciones en programas infantiles de televisión a partir de los años 70. Ella encontró una manera amena de transmitir a los niños su amor por los libros y sus valores ante la vida (Un niño con un libro de poesía en las manos nunca tendrá de mayor un arma entre ellas).
Pero sería injusto e insuficiente catalogarla solamente como una escritora infantil. Eso se quedaría lejos de su verdadera trayectoria personal y profesional.
Madrid tiene muchas puertas, algunas muy famosas. Pero hay una que ha sido número 1 en las listas musicales, y es que la puerta de Alcalá se convirtió en protagonista de una famosa canción que ha resonado insistentemente en las emisoras de radio durante mucho tiempo, al principio como gran novedad y después como gran “clásico”.
Símbolo inconfundible de Madrid, la figura de un oso que se alza sobre sus patas para alcanzar un madroño repleto de frutos viene apareciendo en el escudo de la villa desde el siglo XIII. El oso enhiesto y el verde arbusto constituyen una imagen inconfundible de la capital española.
El Teatro Real de Madrid está considerado como la primera institución de las artes escénicas en España. Es una ópera nacional de referencia, además de estar calificada como Bien de Interés Cultural del Patrimonio Histórico Español.
¿Quién no conoce la Gran Vía de Madrid? Basta con haber visto fotos de alguno de sus edificios más emblemáticos, o haber disfrutado de algún musical en alguno de sus teatros, o haber acudido a alguno de sus famosos comercios o zonas de ocio... Su último tramo se conoce como el Broadway madrileño, por la cantidad de cines y teatros musicales que están o han estado ubicados allí.
Madrid no siempre fue una ciudad moderna y europea. Hubo un tiempo que fue corte de los milagros y milagro de vivir...
Con la llegada a España, en 1700, del primer Borbón, Felipe V Anjou, vienen también costumbres de todo orden. Culinarias también. E inventos de las cocinas españolas, como el de cierto cocinero que,habiéndose roto unos cuantos huevos en un cacharro, ideó removerlos y echarlos a la sartén, ofreciendo el resultado a la reina: tortilla “a la francesa”. Tuvo éxito total.
Con el reinado de Felipe IV, Madrid luce esplendoroso, sobre todo de 1621 a 1665: escritores, artistas, autores teatrales, hacen que el pueblo olvide los desastres exteriores:
En el XVII, el madrileño tiene fama de vago. Bueno, el don lindo, el burguesito, el pijo para entendernos.